Aclaracion

Si tenemos la suerte de no ser vulnerados tecnológicamente encontrarás información, opinión y pensamientos propios del autor, que puedes extraer, citar o compartir.



lunes, 11 de octubre de 2010

Las cosas por su nombre. Una visión de la Ciudad y su política

Cuando todo parece confuso y o varios intentan así hacerlo aparecer, no hay nada más claro que el plan de gobierno de la ciudad.
Para aclarar el enfoque podemos comenzar diciendo que en la ciudad hay un movimiento político y varios movimientos mediáticos, que mientras unos desarrollan su accionar en los barrios otros desarrollan sus estrategias en reuniones de café y estudios jurídicos.
Allá por el año 2003 el justicialismo presenta a la sociedad a Miguel Isa como candidato a Intendente de una ciudad que tenia la fama de devorarse a quien intentaba gobernarla; y este junto a su equipo de aquel entonces (algunos continúan en gestión, otros acompañan desde otro lugar y otro tanto ya no están) presentan un plan de gobierno que se denomino Salta 2010.
Este plan tenía una serie de lineamientos y objetivos acordes a su momento, los cuales se han cumplido en su mayoría, mientras que otros no solo que se han cumplido sino que se han profundizado.
Comenzó el mandato con algunas interpelaciones en los primeros años y se fue moldeando una gestión que se caracterizó por las reuniones de gabinete en los barrios y el ordenamiento económico financiero.
Con varios indicadores determinantes de una gestión exitosa en distintas áreas, fundamentalmente lo económico y lo social, se llega al 2007 y culmina la primera etapa del Plan Salta 2010.
No podemos olvidar que esta etapa estuvo también signada por una fuerte inversión tanto provincial como municipal en obra pública; una inversión por años postergada para una ciudad con alto índice de crecimiento poblacional.
Como decíamos, con estas características meramente enunciativas y por todos conocida, se llegó al 2007, situación que puso nuevamente a la sociedad en posición de elegir intendente.
La campaña electoral de ese entonces, se baso nuevamente en un Plan de Gobierno que esta vez se denominó Salta 2016, y que definía un rumbo y un modelo de ciudad.
Desde este punto de partida renace una gestión votada por casi cien mil salteños.
En las dos últimas elecciones para intendente de esta ciudad, el Partido Justicialista llevó a Miguel Isa como candidato y puso a consideración de los vecinos un plan de gobierno muy pero muy claro.
A pocos meses de lanzarse nuevamente el cronograma electoral vemos sin asombro que salta se convierte en una ciudad llena de operaciones políticas que no solo critican improductiva y maliciosamente, sino que intentan judicializar cuestiones de gobierno popularmente aceptadas.
Hoy abundan los síntomas de una ciudad en notable crecimiento como también brillan por su ausencia las propuestas políticas por parte de algunos sectores de una desarticulada oposición.
No aparecen visiblemente candidatos a competir contra el actual intendente, pero si se escuchan ciertas críticas vacías de contenido y de propuestas. Estas críticas, completamente vacías de propuestas, no le interesan a la gente, simplemente la confunden.
Hoy frente a tan singular situación y como una maliciosa estrategia política, resurge como una vedette de la avenida Corrientes la Judicialización de la política y la denuncia mediática, donde se pretende discutir jurídicamente una propuesta política judicializando decisiones de gestión, que como decíamos anteriormente encuentran en la masa de la sociedad una amplia aceptación.
Es por ello que nos parece conveniente por principio, que la dirigencia política que pretenda hacer pie en la ciudad, traten en la medida posible, de elaborar propuestas que estén a la altura de la ciudad en la que viven y se desarrollan.
Con esto no pretendo hacer una demonización de la oposición, ya que a decir verdad no toda es igual, hay quienes demuestran vocación de poder pero fundamentalmente vocación de construir.
Y en este orden de ideas en una muestra de madurez del razonamiento e integración de ideas en pos de una ciudad mejor para todos, el intendente de la ciudad, toma con gran coraje la responsable decisión de convocar a elementos de orígenes partidarios distintos al oficialismo.
Esto es porque la ciudad necesita de todos y es muy responsable y hay que tener mucho coraje para invitar a formar parte del gobierno municipal a personas de las filas de la oposición porque también son parte de esta sociedad y tienen grandes ideas que se pueden aplicar.
Este es el desafío y aquí otra vez vuelve a la escena el peronismo como herramienta transformadora, en su faz institucional como partido político y en su faz social como movimiento con una doctrina clara y planes de gobierno efectivamente desarrollados por dirigentes comprometidos como Miguel Isa.

La transformación a nivel municipal es indiscutible y su gestión, contrastada con anteriores no tiene comparación. El impulso logrado mediante el apoyo del gobernador Urtubey, no es un dato menor.
Es más, las importantísimas decisiones tomadas por el dirigente político con mejor imagen en la provincia, tales como la descentralización de la obra pública y la descentralización de la ayuda social en quienes tienen contacto más directo con la ciudadanía, han dado ese impulso municipalista que le faltaba a los gobiernos locales.
Hoy tanto la provincia como la ciudad son conducidas por un equipo que tiene una férrea organización política y una gran capacidad de movilización; tal vez sea esto lo que más preocupa ciertos sectores de la oposición.
A esta altura, sin cronograma definido, ya vemos que sectores contrarios al gobierno popularmente elegido, se pasean por los medios intentando arrojar mantos de sospecha sobre una gestión que cuenta con el apoyo de grandes personalidades del arte, la cultura, deportistas, sindicatos, movimientos sociales y de la ciudadanía en su amplia mayoría.
La efervescencia de las elecciones y las campañas no deben ser el escenario de la descalificación y mucho menos la agresión, debemos alentar la madurez en la presentación de las ideas y de las propuestas.
Ahora bien, falta mucho por hacer y viene la mejor etapa, con un municipio con casa propia y un saneamiento financiero sin igual; un plan con grandes temas aun por desarrollar armonizando los derechos del individuo con los derechos de la sociedad y un fuerte acompañamiento del gobierno provincial.